'No me voy, me quedo aquí', cantaba, retador, en uno de los sencillos que se desprende de su disco 'Ahí vamos' (2009). Esta frase se convirtió en una especie de mantra para sus seguidores desde mayo de 2010, esperando que en algún momento el artista reaccionara a los estímulos neurológicos que los médicos le aplicaban. Ahora que ha decidido cruzar el puente que lo mantenía atado a la cama de un hospital ha generado una conmoción continental que empezó en las redes sociales, un fiel retrato de un planeta con desilusión.
El mundo de la música se conmocionó la tarde del jueves 4 de septiembre por la pérdida de una de las grandes estrellas del rock en español. Gustavo Adrián Cerati, de 55 años, murió en la clínica ALCLA de Buenos Aires, en donde estaba hospitalizado desde hace 4 años, a causa de un paro respiratorio. “Murió dignamente sin ningún tipo de sufrimiento, sin ninguna lesión”, dijo el médico a la AFP, quien explicó que al momento del deceso no lo acompañaba ningún familiar porque la muerte se produjo dos horas antes del inicio del horario regular de visitas. De apariencia osada y cabello rizado, Cerati esparció magia por todo el mundo. Era uno más de esas sirenas e hipocampos que 'con su canto nos encantará'.
Desde que un accidente cerebrovascular dejó al intérprete de 'Paseo inmoral' en coma desde mayo de 2010, los partes médicos que la familia compartía por medio de su página de Facebook no indicaban ninguna variación, y con cada aniversario de vida el discurso era el mismo. “El sr. Gustavo Cerati permanece internado en Clínica Alcla, desde el 24 de octubre del 2010, como consecuencia de haber padecido un ACV en mayo del mismo año. Continúa en ARM (Asistencia Respiratoria Mecánica), sin cambios neurológicos, clínicamente estable, sin intercurrencias agudas, y sin lesiones agregadas. Se realiza movilización kinesiológica pasiva y estimulación permanente en las áreas de terapia ocupacional y musicoterapia”, rezaba el último informe publicado el 14 de mayo de 2013.
Su madre, Lilian Clark, sin embargo, siempre se mantuvo expectante de que su hijo, el intérprete de “Cosas imposibles” abriría los ojos y se cumpliría un milagro: “Son cuatro largos años y yo estoy entera, pero los años han venido acompañándome y eso me debilita un poco. Cumple 55 mi nene, y ojalá que sea el definitivo y que, a partir de ahora, pueda contestar él las preguntas', aseguró el pasado 11 de agosto a Tele9 de Chile, fecha en que el músico argentino cumplió 55 años. Y es que al igual que sus miles de seguidores, a pesar de no mostrar mejoras significativas, se mantenía la ilusión de que, a pesar de que no respirara por sí solo, aún estaba entre los nuestros.
Cerati lideró entre 1982 y 1997 la icónica banda Soda Stereo, uno de los grupos de música más populares de Argentina y América Latina. Sus compañeros de letras y acordes recibieron con tristeza la noticia. 'El león dejó de luchar. Qué día triste. Gracias por lo que nos diste, genio único. Gracias por estar en mi vida. Hasta siempre', escribió en su página de Facebook Zeta Bosio, quien integró Soda Stereo, junto a Charly Alberti y Cerati. Alberti, por su parte, dijo con la voz temblorosa que 'Su cuerpo dijo que tenía que ir a otro lado', en diálogo telefónico con el canal argentino TN.
Además de ganar seis Grammy Latinos y vender más de siete millones de discos, Soda Stereo batió récords de público en sus conciertos en Argentina y en giras por Latinoamérica, Europa y Estados Unidos. En diciembre de 1991, reunió 250 mil espectadores en un show gratuito y al aire libre en la tradicional avenida 9 de Julio de Buenos Aires. En 2007 los integrantes volvieron a reunirse una década después de separarse, para la gira 'Me verás volver', que fue visto por un millón de personas en ocho países.
Posterior a su separación como vocalista y guitarrista de Soda Stereo, Cerati hizo de la música su principal experimento, rompió las reglas y lo hizo con ritmos muy diversos, desde la música electrónica hasta la sinfónica. Cosechó una prolífica carrera como solista y de esa etapa quedan para la historia ocho discos. Con “Amor amarillo” dio sus primeros signos de estarse desligando del estilo de su banda, y junto con él celebraba, además, la pronta llegada de su primer hijo, Benito.
En agosto de 2001, Cerati sorprendió con sus “11 episodios sinfónicos”, un disco en vivo grabado en el Teatro Avenida de Buenos Aires, que registra versiones orquestadas sobre clásicos de toda su carrera. Posteriormente, la presentación fue llevada al Teatro Colón de la ciudad de Buenos Aires con dirección de Alejandro Terán, ofreciendo al público “un concierto verdaderamente atípico y conmovedor, con una excelente repercusión de la prensa nacional. La Orquesta Sinfónica Nacional, dirigida por Pedro Ignacio Calderón, llevó a cabo la primera parte instrumental de la velada”, reseña el portal oficial del artista.
El show sinfónico fue también presentado en vivo en México, donde el álbum se mantuvo en los primeros puestos en el ranking de ventas. La respuesta hacia este nuevo cruce musical logró colmar el Auditorio Nacional del Distrito Federal para ver a Cerati junto a una orquesta de cuarenta músicos locales. La serie de presentaciones continuó en el Teatro Teresa Carreño de Caracas, Venezuela, en el Estadio San Carlos de Apoquindo de Santiago, Chile, y en tres shows en el Teatro Gran Rex de Mendoza, Argentina, siempre con orquestas locales de más de 65 músicos en escena.
Su último disco, 'Fuerza Natural', fue lanzado en 2009. Y según la revista Rolling Stones Argentina, 'pocas veces Cerati sumó tanto kilometraje en un solo disco. Mares, galaxias, rutas, convoyes, caminos de tierra, psicodelia y déjà vu'. Fue durante su gira por América Latina que el 15 de mayo de 2010 el músico sufrió un accidente cerebrovascular y se desmayó después de un concierto que brindó en el campo de fútbol de la Universidad Simón Bolívar, en Caracas, Venezuela. Desde entonces, entró en un sueño del que ningún temblor lo pudo despertar.
Cerati estuvo en El Salvador en noviembre de 1999, ya como solista, durante su gira de presentación de Bocanada. El músico salvadoreño Óscar Luna recuerda en su blog sus impresiones de aquel concierto: 'Y desde el costado derecho, de general, de la Feria Internacional, vi como la gente se quedaba estupefacta porque Cerati solo tocó dos o tres temas de Soda Stereo. La mayoría de personas nunca superó Soda, y por eso nunca se dio cuenta que lo mejor de Cerati fue Cerati en solitario.'. El periodista Orus Villacorta, también salvadoreño, escribió en 2009, desde méxico, sobre Cerati, a propósito de la presentación de su último disco Fuerza Natural, 'Gustavo Cerati es un híbrido complejo, un péndulo que se balancea entre manías musicales de ritos a la vieja usanza y apuestas arriesgadas de un tiempo ficcionario al que nos invita a descifrar. Más que stereo, Cerati anda etéreo.'
Ante la noticia del deceso de su padre, sus hijos, Lisa (18) y Benito (21) escribieron en sus redes sociales: 'Vuelta por el universo, alto cada vez más alto. Sin palabras, amor eterno para vos. Poder decir adiós es crecer'. Ambos son fruto del matrimonio que entre 1992 y 2002 mantuvo con Cecilia Amenábar, una modelo, actriz y DJ chilena.
La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner, según retoma la BBC, rindió tributo al músico a través de su cuenta oficial en Twitter: 'Gustavo Cerati y el flaco Spinetta, ídolos populares de varias generaciones de argentinos...', publicó, junto a una foto de ambos cantantes desaparecidos. 'Acá tocaban juntos el tema “Bajan”. En realidad, subieron. Inolvidables. Y juntos para siempre', agregó, en un segundo tuit.
En tanto, el Ministerio de Cultura de Argentina aseguró por medio de un comunicado que 'lamenta el fallecimiento de Gustavo Cerati, uno de los músicos más entrañables de la Argentina, y acompaña afectuosamente a su familia, amigos y colegas'.
El adiós que nadie quería pronunciar llegó. Mientras miles de fanáticos hacen largas filas para despedir a quien ahora deja una cicatriz desperdigada por todo el mundo, desde el ciberespacio se postean frases hito de sus canciones y videoclips diversos para decir #HastaSiempreCerati con un contundente #GraciasTotales.
