Ciudad de México, MÉXICO. Ismael Zambada (a) Mayo ha llenado el vacío de poder en el poderoso Cártel de Sinaloa después de que marinos mexicanos, apoyados en información de inteligencia estadounidense, arrestaron en febrero pasado a Joaquín Guzmán (a) Chapo, dijeron a la agencia AFP dos funcionarios estadounidenses. Mayo Zambada heredó el trono aunque Chapo Guzmán tiene hijos en el negocio, pero ellos carecen de suficiente experiencia y respeto dentro del cártel como para tomar las riendas, dijeron las fuentes.
El arresto del Chapo Guzmán es el mayor golpe al cártel, y la organización criminal no será la misma sin él, pero parece haber evitado el tipo de peleas internas que pueden generarse entre bandas tras la caída de un capo, señalan.
Como era esperado, la batuta fue transferida a Mayo Zambada, de 66 años, un señor de la vieja escuela de la droga que según los oficiales estadounidenses trabajó mano a mano con el Chapo Guzmán en la consolidación del cártel más grande de México, traficando droga hacia a Estados Unidos y alrededor del mundo.
“Es un paso natural basado en el hecho de que el Mayo fue el segundo hombre responsable. No hay nadie más grande que remplace a la cabeza del cártel”, dijo a la AFP uno de los agentes de seguridad estadounidenses bajo condición de anonimato.
Iván y Jesús Alfredo, hijos del Chapo Guzmán, mantendrán un papel dentro del cártel porque Zambada los necesita. “El Chapo pondrá a sus niños bajo la tutela o supervisión de El Mayo. Ellos se alinearán con El Mayo”, indicó el agente.
Un funcionario de seguridad dijo que los hijos de Guzmán quieren un “50-50 de la sociedad” con Mayo Zambada, pero el veterano narcotraficante “es el responsable” y “probablemente no va por eso”.
Iván “Chapito” Guzmán, de 33 años, y Jesús Alfredo Guzmán, de 27 años, tienen un estilo de vida más llamativo que Mayo Zambada, conduciendo lujosos autos, dijeron las fuentes. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos colocó a los hermanos en una lista de sanciones financieras, identificándolos como piezas claves en las operaciones del cártel.
El Ministerio del Interior de México declinó comentar sobre los cambios registrados en el cártel.
“En esto por dinero”
Mike Vigil, un exagente de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA), dijo que los hijos del Chapo Guzmán podrían no ser un desafío para Mayo Zambada.
“En resumidas cuentas, ¿dónde está la lealtad del Cártel de Sinaloa? La lealtad por ahora está con Zambada”, dice Vigil quien tiene información de México y funcionarios estadounidenses sobre el cambio de mando. “Estos tipos (miembros del cártel) están en esto por dinero, y ellos saben que el que puede proporcionar los contactos y el liderazgo es el Mayo”, agrega. “Él ha estado alrededor del bloque, es altamente respetado como narcotraficante, y ha sido por numerosos años el segundo”.
Su hijo, Jesús Vicente Zambada detenido en Estados Unidos por narcotráfico, admitió la semana pasada ante las autoridades que su padre ha sido un líder en el Cártel de Sinaloa desde la década de 1970.
En una entrevista con la revista Proceso en 2010, la única que brindó en los últimos años, Mayo Zambada dijo que trabajó en la “agricultura y la ganadería, pero si puedo hacer un negocio en Estados Unidos, lo hago”.
El capo declaró que una eventual captura suya o asesinato no cambiaría nada en la estructura del cártel, porque una vez que el cabecilla queda fuera “sus reemplazos ya andan por ahí”. Mayo Zambada aparece fotografiado en el semanario, con un brazo sobre el hombro del periodista mexicano Julio Sherer.
Mayo Zambada, por quien Estados Unidos ofrece cinco millones de dólares, opera de manera diferente que el Chapo Guzmán, dice un oficial de seguridad de Estados Unidos. Él es “más inteligente, viejo y sabio” que el Chapo Guzmán, quien tiene “más enemigos de los que puede manejar”, sostuvo.
Nada está garantizado
Aunque la detención del Chapo Guzmán podría hacer que grupos rivales quieran entrar en el negocio, Vigil cree que seguirá siendo la organización criminal más poderosa de México.
El acérrimo enemigo del Cártel de Sinaloa, el Cártel de Los Zetas, ha visto a uno de sus líderes capturado y otro asesinado mientras otras organizaciones se han debilitado por arrestos y por las guerras internas.
Mayo Zambada es más hábil para hacer acuerdos con sus competidores, a diferencia de lo que pasó con el Chapo Guzmán, cuya guerra por el control de Ciudad Juárez dejó miles de muertos en la frontera con Texas, añade el funcionario estadounidense.
No obstante, la estabilidad en el liderazgo del Cártel de Sinaloa no está garantizado, según algunos expertos.
Alejandro Hope, un exagente mexicano de inteligencia, asegura que la organización ha ingresado en un proceso de fragmentación que puede durar meses o años, al igual que otros cárteles que han perdido a sus líderes en años recientes. “La captura de El Chapo acelera ese proceso de transición de grandes grupos a un escenario más complicado”, dijo Hope, analista de seguridad del Instituto Mexicano de Competitividad.
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