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El Salvador enfermo de Anafilaxis: la homofobia en escena

El Salvador es una sociedad en la que se niega voz a la homosexualidad, esa negación es una enfermedad que la dramaturgia de Jorgelina Cerritos nombra como “Anafilaxis”, título del más reciente montaje de la autora dramática más premiada del país. Su estreno mundial fue el pasado jueves 11 de julio sobre las tablas del Teatro Nacional. Sigue su ruta por el Teatro Luis Poma.

Jueves, 25 de julio de 2013
Andrea Orellana

Oscuridad total. De repente, un escenario iluminado tenuemente con dos cajas rojas y fluorescentes. Oscuridad otra vez. Luego frente a las cajas, dos hombres en un silencio compuesto de gritos ahogados. Una hombría que oprime y ahoga sentimientos que siempre han sido prohibidos.

Hay luz todavía en la calle. Sin embargo, en la gran sala del Teatro Nacional todo es oscuridad total. Son las 6:00 p.m. y la tercera llamada acaba de anunciarse. Todo comienza. Sobre el escenario hay dos cajas rojas que captan toda la atención. Más de 150 asistentes posaban su mirada sobre esas cajas, parte de la escenografía que corrió bajo la dirección artística de Eunice Payés.

Silencio. Otra vez oscuridad. Luego, la luz reapareció y trajo consigo al elenco: dos actores que visten de sacos formales y se encuentran parados frente a las cajas rojas. Esos dos actores se llaman César Pineda y Rodrigo Calderón. Esos dos actores se convierten en hermanos sobre el escenario. Dos hermanos que narran la historia de sus vidas entre palabras y coreografías. Danzas que narran etapas de sus vidas. Y hay choques, y hay gritos, y hay besos, y más choques y más gritos...y la euforia se siente y enfermizamente se contagia.

 

Los actores César Pineda y Rodrigo Calderón en una escena de
Los actores César Pineda y Rodrigo Calderón en una escena de 'Anafilaxis', del grupo Escena X Teatro, escrita por Jorgelina Cerritos y estrenada en el Teatro Nacional de San Salvador el 11 de julio de 2013.

El mundo se encajona en ese escenario. Un mundo machista, represor, mentiroso. Hay miedo pero no se puede decir, hay amor pero no se puede demostrar. Los hombres no lloran, los hombres no se asustan, los hombres no abrazan, los hombres no aman. En el mundo de hombres nada de eso es posible y quien lo haga, no es hombre. Es culero.

La obra de teatro “Anafilaxis” refleja el problema social de la homofobia y el machismo como una enfermedad y la cual refleja sus síntomas entre insultos, discriminación, marginación, odio. Se contagia desde el seno familiar, desde las palabras de la abuela, del papá, desde los valores inculcados de una sociedad cerrada y que erróneamente no concibe a hombres con debilidades y sensible. El espectador lo percibe, lo sabe, lo ha vivido: ojos asustados, risitas nerviosas, risitas burlonas, fauces serias de señores y señoras que no sabremos si aprueban o desaprueban la obra, si están sanos o padecen anafilaxis.

Las tesis literarias de Cerritos se corresponden con los informes técnicos de la cuestión: El Salvador es un país al que le cuesta la convivencia normal con la población homosexual, que se ha acuerpado institucionalmente bajo las reivindicativas siglas LGBTI (Lesbianas, Gay, Bisexuales, Transexuales e Intersexuales). Hay que mencionar que en el país existe desde 2009 una Dirección de diversidad sexual adscrita a la Secretaría de Inclusión Social, pero su incidencia y normativa afecta apenas a las personas vinculadas laboralmente al poder ejecutivo. Mientras tanto, en la Asamblea Legislativa, cada periodo electoral hay partidos que negocian con una reforma constitucional que elimine de tajo y sin debate la posiblidad del matrimonio igualitario.  Por su parte, los estudios de Naciones Unidas revelan que en El Salvador la violencia contra el sector de diversidad sexual sigue patrones radicales y alarmantes, hay altos indicadores de abusos, maltratos y discriminación. La expresión más violenta contra esta población es el asesinato y en lo que va del año se reportan 7 víctimas de la intolerancia a la diversidad sexual.

Anafilaxis penetra esta realidad con una pieza de dramaturgia creación de la psicóloga, dramaturga y actriz Jorgelina Cerritos, ganadora del prestigioso premio literario Casa de las Américas en el 2010. Es una hora con diecinueve minutos que se viven a un ritmo intenso la interpretación del elenco del grupo de teatro independiente Escena X Teatro.

Entre las risas al final de la función, César Pineda alcanza a decir que se siente “anafiláxico” y que en sus 18 años de carrera teatral esta obra es muy especial porque fue escrita para ellos desde sus palabras, emociones y sentimientos, por lo que en cada función se conjugan en el actor su ser cotidiano con el ser del escenario. Para Rodrigo Calderón el panorama es similar, las palabras no le alcanzan para contarnos las diferentes reacciones que ha obtenido de los asistentes, entonces saca un papel de su bolsa y lee lo que uno de los espectadores le escribió: “Tocaste las fibras más profundas de mi machismo, y eso que soy feminista”. La función apenas comienza.


Más información sobre las funciones de Anafilaxis en el Teatro Luis Poma en La Guía de El Faro.

'La dramaturgia es la hija despreciada del teatro': Plática con Jorgelina Cerritos, premio Casa de las Américas 2010

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