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Las pandillas entregan 267 armas en el primer aniversario del traslado de sus líderes

Los pandilleros de la MS-13 y el Barrio 18 entregaron un arsenal en el que había fusiles M-16, pistolas y granadas en un acto público celebrado en la plaza central de Apopa. En el evento también se firmó el acta con la que esta ciudad se convirtió en el sexto “municipio libre de violencia” y se conmemoró el primer aniversario de la tregua.

Lunes, 11 de marzo de 2013
AFP / El Faro

Pandilleros entregaron en el sábado 9 de marzo en Apopa 267 armas. Entre ellas había desde fusiles de asalto M-16 hasta armas artesanales llamadas
Pandilleros entregaron en el sábado 9 de marzo en Apopa 267 armas. Entre ellas había desde fusiles de asalto M-16 hasta armas artesanales llamadas 'trabucos', elaboradas con tubo de acero y que disparan balas de verdad. En el evento también se firmó el acta con la que esta ciudad se convirtió en el sexto “municipio libre de violencia” y se conmemoró el primer aniversario de la tregua. Lea más sobre el acto oficial en la nota de El Faro ' Las pandillas entregan 267 armas en el primer aniversario del traslado de sus líderes'. 

Integrantes activos de la Mara Salvatrucha (MS-13) y el Barrio 18 entregaron este sábado un lote de 267 armas de fuego y explosivos, luego de un acto público en Apopa, ciudad que se convirtió en el sexto “municipio libre de violencia”. En la actividad se conmemoró también el primer aniversario desde que el gobierno sacó a los palabreros de ambas pandillas del Centro Penitenciario de Seguridad Zacatecoluca, decisión que activó una tregua que permitió, entre otras cosas, que 2012 cerrara con una reducción del 41% en la cifra de homicidios.

Fusiles de asalto M-16, pistolas, ametralladoras y granadas fueron entregados por las pandillas en una plaza central de Apopa, ante la presencia de decenas de habitantes de esa ciudad que acudieron a observar el acto.

Esta es la segunda ocasión en que las pandillas entregan armas de fuego, pues el 13 de julio de 2012, ante el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, entregaron otras 77 armas, casi todas en buen estado.

Las armas entregadas, explicó el ministro de Justicia y Seguridad Pública, David Munguía Payés, serán analizadas por la Policía Nacional Civil (PNC) para determinar si han sido utilizadas en hechos delincuenciales.

El exjefe guerrillero Raúl Mijango, uno de los mediadores de la tregua, indicó que la nueva entrega de armas es “una muestra de buena voluntad y de compromiso para hacer avanzar la tregua”.

Apopa, el sexto “municipio libre de violencia”

Apopa, una de las ciudades más populosas del área metropolitana de San Salvador, se convirtió el sábado en la sexta que se suma a la iniciativa “Municipios libres de violencia”, apadrinada por el gobierno salvadoreño. Representantes de la MS-13 y Barrio 18 firmaron un acta con la que ambos grupos se comprometieron a poner fin a la violencia.

Al acto asistieron como testigos Munguía Payés, y los mediadores de la negociación entre el gobierno y las pandillas: Raúl Mijango y el vicario castrense Fabio Colindres.

Los pandilleros de las dos agrupaciones que llegaron al acto de Apopa se apostaron, por separado, muy cerca de la mesa en que se firmó el acta declaratoria de ciudad libre de violencia, pero eran vigilados muy de cerca por agentes de la PNC.

“Ya con Apopa son seis las ciudades en donde los salvadoreños podrán respirar un ambiente con mucha menos violencia, pues los jóvenes de las pandillas han adoptado ese compromiso de ‘Ya no más violencia’”, declaró Mijango a la agencia AFP.

En virtud de ese proceso de distensión, las pandillas también decidieron recientemente dejar libres de violencia a otras cinco ciudades del país: Ilopango, La Libertad, Santa Tecla, Quezaltepeque y Sonsonate.

Poco antes del acto en Apopa, líderes de las pandillas montaron una rueda de prensa en el centro Penitenciario La Esperanza (Mariona), donde aseguraron que el proceso de distensión “ha avanzado” pese a “los obstáculos” que el mismo ha tenido que afrontar.

“Muchos no creen en este proceso, creen que es una farsa. Pero no es así, pues nosotros hemos puesto de nuestra parte para que esta tregua no se caiga y vamos a seguir porque la misma avance hacia algo duradero, pero necesitamos que la gente nos apoye, que todos los sectores se unan para encontrar una salida a esta violencia”, dijo Carlos Mojica Lechuga (a) Viejo Lin, uno de los palabreros del Barrio 18.

Un año con tregua

La tregua entró en vigencia el 9 de marzo de 2012, cuando el gobierno permitió la salida del Centro Penitenciario de Seguridad Zacatecoluca de una treintena de líderes de la MS-13 y el Barrio 18. En diciembre ser sumaron otras tres pandillas minoritarias –Mara Máquina, Mao-Mao y La Mirada Lokotes-13–, y las cifras oficiales constatan un descenso sin precedentes en las cifras de homicidios: de catorce asesinatos diarios que se cometían antes de la tregua a un promedio de seis diarios con la tregua vigente.

A pesar de estas cifras, el polémico proceso de negociación impulsado por el gobierno –que ni siquiera se atreve aún a aceptar esa palabra– siendo visto poco transparente por la mayoría de los salvadoreños, según se confirmó en una reciente encuesta de LPG Datos.

Para el analista político Antonio Martínez, la tregua por sí sola “no es una solución al problema de violencia” en el país, pues se requiere de otros aspectos que deben poner en marcha las autoridades.

“Es cierto, no se niega que hay menos muertes ahora, pero es importante tener definidos aspectos como la prevención o de cómo se va a reinsertar a los pandilleros a la sociedad como gente productiva. Esos son detalles que de momento no están claros y que se deben tomar en cuenta para que el proceso no se caiga”, estimó Martínez.

Para el gobierno salvadoreño, la tregua ha sido positiva pese a que la misma tiene “sus imperfecciones”. “Nosotros hacemos una evaluación positiva de la tregua. Hay menos homicidios, y eso ha permitido sacar al país de la lista de las naciones más violentas en el mundo. Pero hay imperfecciones, como en todo proceso de tregua, pues aún las pandillas son el principal generador de violencia en el país”, aseguró Munguía Payés.

En las cárceles de El Salvador están recluidos poco más de 10 mil pandilleros, mientras que en barrios y calles permanecen libres unos 50 mil, según datos oficiales.

© Agence France-Presse

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