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Cómo el FMLN logró rebasar a Arena en la intención de voto para presidencial de 2014

Las más recientes encuestas del Instituto Universitario de Opinión Pública y de LPG Datos revelaron que el FMLN terminó el año como el partido con mayor intención de voto presidencial en la carrera para 2014. ¿Qué ha hecho posible que Arena pasara al segundo lugar? Según los números más íntimos de ambas encuestas, la conquista del voto rural y de los sectores más pobres ha sido un factor clave.

Jueves, 3 de enero de 2013
Sergio Arauz

Después de meses en que la diversidad de encuestas sobre intención de voto presidencial venían mostrando una ventaja del partido opositor Arena sobre el gobernante FMLN, los más recientes sondeos de LPG Datos y del Instituto Universitario de Opinión Pública (IUDOP) sorprendieron al país al mostrar que el partido de izquierdas había logrado revertir la tendencia. El Faro auscultó en los números detrás de los números para tratar de averiguar las razones del cambio de posiciones, y en los dos casos se evidencia un fenómeno: los efemelenistas lograron cautivar el voto de los salvadoreños más pobres, de menor formación académica y de las zonas rurales del país, que históricamente estuvieron del lado de Arena.

En la encuesta de LPG Datos publicada el 2 de diciembre pasado, con base en entrevistas hechas en noviembre, el FMLN por primera vez en el año apareció arriba en la medición de intención de voto por la presidencia. La ventaja de 1.1 puntos porcentuales del FMLN sobre Arena está por debajo del margen de error, pero fue la primera vez en cuatro mediciones hechas en 2012 que la bandera roja aparecía por encima de la tricolor arenera.

Faltando 15 meses para la elección presidencial de febrero de 2014, el estudio a nivel nacional de LPG Datos mostraba que ante la pregunta de por cuál partido votarían si los comicios fueran el próximo domingo, un 29.3 % dijo que por el FMLN, mientras que un 28.2 % manifestó una intención de voto por Arena.

El IUDOP presentó su propia investigación unos días más tarde, y en él el FMLN también aparecía ligeramente arriba, con 2.5 % de ventaja. 

Las cifras detrás de los números presentados cuando fueron divulgados los resultados de las encuestas dicen que el FMLN ha logrado cautivar a un votante que por tradición le era ajeno: los salvadoreños más pobres, los de menor grado educativo y los de las zonas rurales del país.

 

Tendencia en intención de voto presidencial del FMLN desde 2005 hasta 2012, según Encuesta de LPG Datos.
Tendencia en intención de voto presidencial del FMLN desde 2005 hasta 2012, según Encuesta de LPG Datos.

La gráfica anterior, proporcionada por LPG Datos, muestra el progresivo crecimiento de la bandera del FMLN en la intención de voto presidencial entre votantes del sector rural. En noviembre de 2005, la marca efemelenista no lograba superar ni el 10 %. Tres meses más tarde, en febrero de 2006, había ganado casi cinco puntos y transcurridos otros dos años, en febrero de 2008, cuando el FMLN estaba embarcado en la campaña presidencial con Mauricio Funes como candidato, el partido de izquierdas logró un salto de 13 puntos para escalar hasta el 28 % en intención de voto entre la población rural. El máximo nivel en siete años lo obtuvo en la investigación de noviembre de 2012, cuando alcanzó un 32.8 %. 

En contraste, Arena ha tenido una pérdida en este sector poblacional, descendiendo desde el 27.2 % que obtenía en noviembre de 2005 hasta un 22.3 % en noviembre del año pasado.

A este fenómeno se suma también un hecho que quedó registrado en los números de LPG Datos: mientras la opinión sobre el candidato presidencial del FMLN, Salvador Sánchez Cerén, se ha mantenido con bajos niveles de variación, Quijano sí tuvo una gran caída entre agosto de 2012, cuando alcanzó su máximo, y noviembre. En agosto, la diferencia entre opiniones positivas y negativas respecto del alcalde superaban los 60 puntos, pero ya para noviembre la brecha era de apenas 34.

Al medir partido contra partido, los números dicen que la marca del FMLN ha mejorado su rendimiento en las encuestas. En el lapso de 8 meses, el FMLN revertió la ventaja de 3.5 % que situaba a Arena como favorito en la intención de voto presidencial de la encuesta de LPG Datos de febrero. En mayo, la ventaja de Arena era de 2.7 puntos (28.8 contra 26.1 %) y en agosto llegó a tres (29.6 contra 26.6 %). 

En el caso del IUDOP, no midió intención de voto presidencial en 2009 ni en 2010 ni en 2011, pero en 2008 la bandera del FMLN aparecía con una distancia de 16.2 puntos de ventaja con respecto a la de Arena, cuando se acercaba la presidencial de 2009 que ganaron los efemelenistas. El IUDOP preguntó: Si las elecciones fueran el próximo domingo, ¿por cuál partido votaría usted para presidente? Arena aparecía con 28 puntos y el FMLN con 44.2 %. 

LPG Datos y IUDOP confirman que el FMLN, al ganar por primera vez la presidencia del país, también heredó un importante número de votantes con niveles de escolaridad bajos y de sectores muy pobres.

'Desde finales de 2009 registramos ese fenómeno, es el votante de menos ingresos, del sector más pobre,  el que antes votaba por Arena, ahora dice que en las próximas elecciones votaría por el FMLN', dice Jeannette Aguilar, encargada del Instituto Universitario de Opinión Pública.

En la última encuesta realizada en noviembre de 2011 por el IUDOP y hecha pública es pasado 12 de diciembre, el 34.8 % de las personas respondió que votaría por el FMLN y un 32.3 % dijo que votaría por Arena. 

Al examinar otros datos que esconde la misma pregunta, los números del IUDOP revelan que en el sector rural la ventaja del FMLN es contundente, y que esta es una situación que ha cambiado respecto del pasado: el 39.6 % de los encuestados del sector rural respondió que votaría la bandera del partido en el gobierno, mientras que un 27 % dijo que lo haría por la de Arena.

El último estudio de opinión que realizó el IUDOP en 2003 también preguntó por la intención de voto para las elecciones presidenciales que ganó Arena, con Antonio Saca. En el sector rural, el 18.3 % las personas respondió que votaría por el FMLN, mientras que el  44.7 % de las personas del área rural respondió que votaría por Arena.  

La debilidad de la bandera efemelenista entre los pobladores rurales, los de los estratos socioeconómicos más bajos y los de menor formación académica era un fenómeno del que la dirigencia del FMLN estuvo consciente desde siempre. De hecho, entre los puntos principales de su estrategia electoral para 2014 estaba aprovechar su primer gobierno nacional para enfocarse en promocionar los programas gubernamentales entre los sectores agrícolas y rurales. Esto, con el objetivo de llegar al votante que no cautivaba en elecciones pasadas. 

En 1997, el diputado Dagoberto Gutiérrez, del FMLN, que había optado por estudiar una licenciatura en teología, lo planteó en estos términos: dijo a un periodista que esperaba que la teología le permitiera encontrar respuesta en el campo de la fe a una pregunta que el marxismo no le había ayudado a explicar: '¿Por qué los pobres votan por el partido de los ricos?' 

Es el voto clientelar

El jefe de LPG Datos, Edwin Segura, tiene una explicación a este fenómeno. Las personas de sectores rurales, por lo general son aquellas más pobres y con niveles de escolaridad más bajos, y se comportan diferente al votante urbano, cuyo nivel de escolaridad es superior y cuenta con un nivel promedio de ingresos más elevado. 'Se tiene que tomar en cuenta que el elector capitalino, en promedio, es bachiller. Por ejemplo. Y el elector nacional, en promedio, cursó hasta sexto grado', expone Segura al perfilar a los distintos votantes.

Segura dice estar convencido de que el fortalecimiento del aprecio al FMLN en el sector rural o en aquellos con menos formación académica y en los más pobres no responde a un cambio ideológico del votante. 'Es un cambio pragmático, es gente que recibe un premio del Estado y que dicen 'bueno, como este gobierno ahora nos está dando esto, apoyémoslo'. Es el voto clientelar', dice Segura. 

Este premio del que habla Segura pueden ser los uniformes y útiles escolares de las familias con hijos que asisten a escuelas públicas, las personas inscritas en el programa de atención a la pobreza que reciben dinero en concepto de bono, las personas que recibieron un título de propiedad de manos del presidente o un funcionario, los adultos mayores que lograron una pensión mínima o, simplemente, aquellos funcionarios de bajo rango que ocupan un cargo en una de las oficinas del Estado.

Eso está detrás de la ventaja de más de 10 puntos que el FMLN obtuvo en el sector rural a Arena en intención de voto presidencial.

Segura razona que los intereses y la visión del votante del área rural es muy diferente a lo que aprecia un votante urbano, especialmente si este pertenece al Área Metropolitana de San Salvador (AMSS). Al votante rural no le interesan demasiado temas como la corrupción o el respeto a la institucionalidad, porque por lo general tiene preocupaciones más apremiantes.

Y, en cambio, el FMLN, que solía tener un bastión entre la clase media y particularmente entre el votante del AMSS, valora otro tipo de actuaciones de los partidos políticos, y eso podría explicar, en parte, que ahora el elector metropolitano haya dado la espalda al FMLN para apoyar a Arena, especialmente después de un año en que los diputados efemelenistas fueron protagonistas de un largo enfrentamiento con la Sala de lo Constitucional. En la última encuesta de LPG Datos, el 35 % de los entrevistados en el AMSS respondió que votaría por Arena y solo un 22.8 % dijo que lo haría por el FMLN.

Pero posiblemente no todo se explica por la variación en el voto rural y de los más pobres. Lo que hacen o dicen los candidatos también tiene sus efectos, y aunque el candidato presidencial del FMLN, Salvador Sánchez Cerén, no ha tenido mayor variación en términos de aprecio entre los votantes, su rival arenero, Norman Quijano, sí ha sufrido un deterioro.

Cuando a Segura se le pregunta sobre la caída de 30 puntos de Quijano en un trimestre, responde que el alcalde capitalino no ha logrado sintonizar con el votante nacional. 'Creo que Norman Quijano no entiende al votante del interior del país', sentencia. Agrega que LPG Datos ha registrado desde hace buen tiempo la opinión de los salvadoreños sobre el ordenamiento de los centros de las principales urbes del país. Y aunque la mayoría de capitalinos y de ciudades como Santa Ana o San Miguel se expresaron en favor de ordenar las ciudades, los del interior fueron muy claros en que no aprobarían un ordenamiento producto del uso de la fuerza. Por lo tanto, posiblemente Quijano está pagando el costo de haber desalojado con violencia las ventas sobre la Calle Arce, a finales de octubre. 

¿Y la opción Saca? 

LPG Datos y IUDOP han medido la popularidad de un personaje que podría romper la bipolaridad. Pero la pregunta sigue abierta. ¿Hay espacio para que cuaje un tercer gran competidor en las presidenciales de 2014? El expresidente Antonio Saca dijo hace dos semanas que había un 200 % de posibilidades de que este año lance su candidatura. 'Y si yo lanzo mi candidatura, seré presidente en 2014', dijo a un periodista del canal 21, que le interrogó con motivo de una actividad en la que un grupo de campesinos rendían gratitud al exgobernante por su gestión finalizada hace tres años y medio.

Saca aparece en las encuestas de LPG Datos y del IUDOP como figura pública popular, aunque, por supuesto, no ha sido medido como candidato. Para el jefe de LPG Datos es incógnita. 'La gente no tiene buena opinión de Gana, pero parece que está tratando de formar un movimiento social... No sabemos, pero podría afectar más al FMLN, los indecisos podrían irse más con una tercera opción', concluye Segura.

En este año, en LPG Datos el partido Gana no ha superado el 3 % de intención de voto, y el nombre de Saca nunca ha sido medido como candidato firme. En su más reciente encuesta, el IUDOP incluyó la siguiente pregunta: 'Si en 2014 los candidatos inscritos para las elecciones presidenciales fueran Salvador Sánchez Cerén, Norman Quijano y Antonio Saca para presidente, ¿a quién escogería?' El 30.3 % de la gente dijo que elegiría a Sánchez Cerén, un 33.5 % escogería a Norman Quijano y un 24.1 % dijo que prefería a Antonio Saca. Sin embargo, la medición de candidato contra candidato sigue abierta y habrá que esperar a que Saca dé su siguiente paso.

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