La construcción de la presa El Chaparral se detuvo en julio de 2010. El contratista responsabilizó a la CEL alegando que no dio información suficiente para erigir la obra, y la CEL culpó a la empresa Astaldi, pero en julio pasado llegaron a un acuerdo de pago de $108 millones por la obra ejecutada. La CEL calla sobre los términos del acuerdo y ya tiene luz verde de la Corte de Cuentas para contratar a otra firma sin necesidad de licitación.
Un silencio de CEL valorado en $108 millones
La construcción de la presa El Chaparral se detuvo en julio de 2010. El contratista responsabilizó a la CEL alegando que no dio información suficiente para erigir la obra, y la CEL culpó a la empresa Astaldi, pero en julio pasado llegaron a un acuerdo de pago de $108 millones por la obra ejecutada. La CEL calla sobre los términos del acuerdo y ya tiene luz verde de la Corte de Cuentas para contratar a otra firma sin necesidad de licitación.
Por Efren Lemus