Sufren el rechazo de una sociedad que los margina de casi todos los espacios por algo que solo se trata de su vida privada, y la marginación los hace propensos, más que a cualquier otro grupo en el país, a adquirir al VIH-sida. A pesar de todo, son una muestra de personas deseosas de vivir y con temple para sobreponerse a la adversidad.
Las vidas de Maybeline
Sufren el rechazo de una sociedad que los margina de casi todos los espacios por algo que solo se trata de su vida privada, y la marginación los hace propensos, más que a cualquier otro grupo en el país, a adquirir al VIH-sida. A pesar de todo, son una muestra de personas deseosas de vivir y con temple para sobreponerse a la adversidad.
Por Luis Velásquez