Pagó más de un cuarto de millón de dólares por ocho frecuencias televisivas. Este abogado, que dice sorprenderse de que lo califiquen como 'desconocido', tiene más canales que el emporio TCS. Su pasado como abogado muestra a un representante de personajes a los que algunos vincularon palabras como lavado de dinero, narcotráfico, política y corrupción.